Participación Escolar



Hoy en día vivimos en una sociedad altamente individualista. La mayoría de personas busca sólo por su propio interés, y no es capaz de pensar en problemas de mayor calado que requieren de la colaboración de todos. Es por eso que la participación escolar actual deja mucho que desear, y hacen falta propuestas innovadoras para conseguir que la comunidad educativa en su conjunto sea mucho más activa.

A mi juicio, este tema se puede afrontar desde dos perspectivas (que no son incompatibles). Por una parte, generalmente, la familia se preocupa mucho por cómo es el rendimiento académico de su hijo, y si éste empeora no tardan en ir hablar con el tutor o los profesores correspondientes. No obstante, quitando las preocupaciones académicas, las familias no suelen estar muy involucradas en la vida del centro escolar. Para solventar ésto, propongo tres actuaciones diferentes:

  • Olimpiadas Escolares: Me parece una forma estupenda en la que las familias, de todo tipo, puedan cooperar y trabajar en juntas. Pero para evitar la competitividad, lo ideal sería que se juntaran varias familias en un mismo equipo como si fueran un mismo "país". De esta forma, damos facilidades para crear escuela, en el sentido de que la mezcla podrá ocasionar que fragüen nuevas amistades no sólo a nivel de los alumnos, sino entre padres. Esa buena comunicación entre padres puede propiciar un mejor entendimiento para llevar a cabo diferentes propuestas educativas.

  • Charlas TED: Otra iniciativa interesante me parece que las familias den unas TED talks, en donde hablen de lo que quieran, ya sean los progenitores, tutores, hermanos, o los mismo alumnos o profesores. Es una muy buena forma de conocer a todos los actores del sistema educativo, y para que se extienda la idea de que, al final, todos somos personas y tenemos nuestra propia vida y dificultades. 

  • Semana cultural: Esta última alternativa sería parecida a la primera, pero en la que primaría la colaboración. Es decir, proponer un concurso de cocinas, de escritura, de manualidades... todo en una semana (o dos) en la que se fueran intercalando diversas actividades de carácter lúdico. De nuevo, lo que pretendemos es crear una cierta cultura dentro del instituto, pues si el grupo social (completo) en su conjunto está a gusto, se conocen los intereses del otro, entonces habrá muchos menos problemas de conducta y los alumnos tendrá mucho mayor éxito (no sólo académico, sino también profesional).

Pero a parte de la familia, lo que deberíamos es fomentar la participación del alumnado en concreto, para que se involucre más en la vida de la escuela. Así, se proponen proyectos como una radio o periódico escolar, en donde puedan expresar sus inquietudes y problemas, para que sean oídos por sus superiores. En definitiva, se trata de motivar a los alumnos para que formen parte de la comunidad y, en última instancia, en el proceso de su propio aprendizaje.


Como digo, este conjunto de actuaciones y propuestas deben ir de la mano de un cambio de mentalidad de la sociedad, debemos empezar más en el colectivo y menos en el individuo, sólo así podremos mejorar el sistema educativo que, aunque actúa en cada persona por separado, necesita unas directrices de conjunto.

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